Datos técnicos:
Cámara: Nikon D5600 Lente: 18-55 mm f/3.5-5.6
ISO: 100 Exposición: 1/6 seg en f/ 7,1
Distancia focal: 46 mm
Nuestra naturaleza muerta busca retratar el choque/cruce entre lo natural y lo artificial. En donde juegan un papel fundamental la paleta de colores destacada en ella. Por un lado se encuentran los colores cálidos que representa todo lo natural, lo que nace de la tierra. Mientras que los objetos de tonalidades más frías representan todo lo creado por el hombre, aquello que se ha visto modificado por ellos y que posee una repercusión sobre su contraparte, la naturaleza.
El color del líquido, tan vibrante, representa la contaminación ambiental generada por el ser humano. El agua, una de las fuentes fundamentales de vida, al verse afectada por esta, provoca la degradación de la forma de vida de todos los seres vivos que se alimentan de ella. Junto a la contaminación de nuestro planeta, toda forma de vida se ve afectada por esta, y eso queremos dar a demostrar en este trabajo, mostrando una flor marchita y las frutas en un estado maduro.
A pesar de la crítica que buscamos representar en la fotografía, esta se ve embellecida con la composición que se lleva a cabo. Los colores y la luz suave logran una visión tan armónica, mostrado lo naturalizado que tenemos actividades que perjudican nuestro mundo. Cosa que se ve reflejada en la ubicación de los objetos, conviviendo en un desorden, que deja a relucir las catástrofes que provocamos junto al arrastre de miles de generaciones que no tenían conciencia sobre los daños que generaban. La caza indiscriminada, la tala de árboles, la experimentación con animales, consumir y tirar basura por montones, las actividades de grandes empresas, el uso de transgénicos, entre otras actividades que nos alejan de lo que es la vida natural.
En el aspecto técnico decidimos utilizar luz natural lateral proveniente de la ventana, donde los rayos del sol no pegaran directamente, sino que se difuminaran a través de la cortina blanca. Nos dimos cuenta que la iluminación que conseguíamos era demasiado suave, así que decidimos rebotar un rayo de luz en una pantalla blanca para que los rayos incidan más directamente.
PROCESO
El primer día hicimos una llamada para proponer ideas y debatir sobre lo que queríamos hacer.
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